Nunca me elijas, de todas tus opciones jamás hagas que de ahí salga victoriosa, mira a otro lado, hace como sino existiera, evitame y olvidate de lo que soy o de lo que hice para estar en tus opciones, porque si en algún momento pensaste en que me elegis, es porque renuncias a otra cosa, quereme y bien, agradece a una casualidad (o causalidad) el que yo este en tu camino, pero nunca me elijas.
Escrito por Ayelén Medina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario